Carlos Custer recordó a Francisco: “Siento enormemente su pérdida, ha sido un líder moral extraordinario” (+Video)

En una emotiva entrevista con el programa Línea Directa por FM Federal 104.7, el exembajador argentino ante la Santa Sede, Carlos Custer, conversó con Alejandro Garzón, acompañado por Julio Araneda y Nahel Garzón, sobre su historia con el Papa Francisco, sus encuentros personales y su legado como líder espiritual y político global.
En una charla cargada de memoria, afecto y reflexión política, Carlos Custer —referente histórico del sindicalismo argentino, su sindicato de base es ATE, exdiputado nacional y exembajador argentina ante la Santa Sede (Vaticano)— rememoró su relación personal con Jorge Bergoglio y analizó el impacto de su papado tanto en la Iglesia como en el escenario internacional.
“El Papa Francisco fue un hombre bueno, un hombre de Dios. Ha hecho un papado extraordinario no solo para la Iglesia Católica, sino para el mundo. Fue un líder moral extraordinario”, afirmó Custer, quien ocupó la embajada argentina en el Vaticano durante el pontificado de Juan Pablo II, fue recibido personalmente por Francisco en la residencia de Santa Marta.
La última visita y el compromiso con ATE
Durante la entrevista, Custer relató su último encuentro con el Papa, en agosto de 2024. “Fui a Roma, le avisé que iba y me dijo ‘venite a la casa, no a la oficina’. Me recibió en Santa Marta y hablamos de muchas cosas, entre ellas el centenario de ATE. Le pedí que recibiera una delegación y cumplió su promesa”.
Francisco recibió al secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar, y a Mercedes Cabezas, secretaria adjunta, en una audiencia privada el 9 de febrero de 2025, apenas días antes de ser internado por una bronquitis. “Ya le costaba hablar, pero mantuvo el compromiso. Se sacó una foto con la bandera de ATE, intercambiaron regalos. Fue un gesto enorme”.
Una Iglesia menos vertical y más justa
Custer resaltó que Francisco impulsó una transformación profunda dentro de la Iglesia: “Empoderó a las mujeres, impulsó la transparencia en las finanzas vaticanas y creó mecanismos de participación horizontal como los sínodos”.
“Nombró como presidenta de la Comisión del Vaticano a una mujer, por primera vez en la historia, y debajo de ella hay un cardenal. También incluyó a una teóloga argentina como vicepresidenta de la Comisión Pontificia para América Latina. Eso nunca se había visto en la Curia Romana”.
Sobre la lucha contra los abusos, fue contundente: “Condenó severamente y aplicó penas duras. Ningún obispo podía proteger a un abusador. Francisco rompió con el pacto de silencio”.
Una voz firme contra la guerra y por los pueblos desplazados
“Francisco fue una voz implacable contra la guerra, el capitalismo salvaje, la exclusión, y especialmente en defensa de los refugiados y desplazados”, señaló el exembajador. “Su primer viaje como Papa fue a Lampedusa, donde llegan los migrantes africanos que cruzan el Mediterráneo en condiciones inhumanas. No fue a París ni a Nueva York. Fue con los pobres, los olvidados”.
Custer también recordó el compromiso del Papa con la causa palestina y su oposición a la lógica bélica: “Denunció el genocidio en Gaza, criticó la industria armamentista, y siempre apostó a la diplomacia, aún con palabras suaves. El Vaticano no tiene divisiones militares, tiene palabras, y esas palabras han sido poderosas”.
El legado y una advertencia
Para Custer, el desafío ahora es preservar el legado de Francisco. “Él decía que la barca de Pedro tiene 400 millones de fieles y hay que evitar que alguien se baje. Quería sumar, no excluir. Pero los sectores conservadores no lo querían”.
“Era un revolucionario dentro de una estructura pesada como la Iglesia. Me dijo que el ordenamiento de mujeres llegaría, pero había que ir con cuidado. Tenía una estrategia clara: avanzar sin romper. Hoy deja un vacío enorme, pero también deja una huella imborrable en la historia de la humanidad”.
Esta entrevista fue realizada en el programa Línea Directa por FM Federal 104.7, conducido por Alejandro Garzón, junto a Julio Araneda y Nahuel Garzón, desde los estudios Hugo Giménez Agüero en Río Gallegos.